“¡Pero no os quedéis fuera!, que el perro puede entrar”. Cada vez es más habitual escuchar esta afirmación a los propietarios de diversos establecimientos de la capital charra, cuando ven que uno de sus clientes se queda en la calle junto a su mascota esperando a que sus acompañantes terminen de comprar.
Y es que desde hace un tiempo, no es raro ver en tiendas de ropa y centros comerciales clientes con sus perros en brazos o a los propios canes caminando por el local junto a su dueño. De hecho, quienes tenemos perro, pocas veces nos planteamos dejarlo en casa cuando vamos a hacer pequeñas compras. Lo que quizá es menos habitual es poder tomarnos un café o un aperitivo acompañados de nuestros peludos. A diferencia de otras ciudades europeas, en Salamanca casi se cuentan con los dedos de la mano los bares y cafés que permiten la entrada de mascotas. Según recoge la página web Sr.Perro (http://www.srperro.com/), en la capital contamos ya con 17 lugares dog-friendly, es decir, 17 locales hosteleros que aceptan la entrada de perros.
El Rincón de Veca. © Micaela de la Maza/ Sr.Perro. |